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.: Motivación
Baeza es un lugar y un hito esencial en la vida de San Juan de Ávila, patrono del clero español desde 1946 y apóstol de Andalucía. Es ahí donde cuaja la escuela sacerdotal avilista. El Maestro y Teólogo Ávila pone en marcha en Baeza la Universidad que se convierte en un gran centro de formación del clero.
Como afirma el maestro Juan Esquerda Bifet, donde se ha conservado un mayor influjo del Maestro Ávila es a partir de la universidad de Baeza, que puede considerarse la institución universitaria emblemática del maestro, por haber empleado en ella sus mejores energías y sus mejores discípulos.
Desde su magisterio en Baeza Juan de Ávila influyó poderosamente en la formación de varias generaciones de clérigos; por eso se puede decir que el Maestro Ávila, a través de la Universidad de Baeza, creó una precisa tipología sacerdotal, la del clérigo reformado, austero en sus costumbres, predicador enardecido por el estudio de la Escritura, hombre de recia oración, reconocible a simple vista por su porte externo. Como dicen sus biógrafos (Granada – Muñoz) un clérigo de Baeza se conoce en toda España en la modestia, la moderación del traje, compostura y gravedad de costumbres.
Se puede decir que la Universidad de Baeza fue el centro más logrado de formación sacerdotal pretridentino, que suplió ampliamente la labor educativa del clero diocesano que el Concilio de Trento (1545-1563) señalaría algunos años después con el decreto Cum adolescentium aetas.
La universidad de Baeza fue fundada por bula de Pablo III, en 1538, a ruegos del clérigo Rodrigo López, natural de Baeza y residente en Roma, quien había renunciado ante el pontífice sus numerosos beneficios, para que sus rentas ofrecieran los recursos económicos destinados al sostenimiento de la naciente universidad. En 1539, se expidió otro breve por el que se autorizaba a los hermanos López para que nombraran un juez conservador a favor del centro universitario, y el 6 de agosto de ese año, el fundador, desde Roma, dio poder al maestro Juan de Ávila para ejecutar las bulas fundacionales. En 1542, un rescripto de la Penitenciaría Apostólica autorizó el inicio de las clases, y siete años más tarde, en 1549, se celebró la primera graduación, en que fueron declarados doctores Bernardino de Carleval y Gaspar Loarte, dos de los más aventajados discípulos de Juan de Ávila.
Los primeros estatutos fueron redactados por el maestro Ávila. El santo ordenó las facultades de artes y teología, y excluyó decididamente el derecho, al no establecer cátedra de cánones, con la intención de potenciar el estudio de la teología por el clero secular. En la universidad de Baeza existían tres cátedras de teología: positiva (Escritura), escolástica según la vía de Sto. Tomás (tomismo), y según la vía de Durando (nominalismo). La particularidad más notable de la facultad de teología de Baeza fue la cátedra de positivo, que funcionó durante varios años junto con la de escolástico, y que pasa por ser la primera de este nombre que se conoce, con la peculiaridad de que fue fundada cuando la división de la teología en positiva y escolástica no era aún muy común en las escuelas universitarias.
En consecuencia, el ordenamiento académico del estudio baezano reflejó claramente el concepto que Ávila tenía de la universidad: puesto que la orientación fundamental de ese centro pedagógico era la formación de los futuros miembros del clero, el estudio de los cánones quedaba descartado, pues se pensaba que lo importante para los sacerdotes era aprender teología. La enseñanza que impartía el estudio biacense no era simple formación intelectual; era un centro de formación íntegra, adelanto que lo que posteriormente serían los seminarios, salvo la vida en común de los estudiantes. Baeza fue, en opinión de Melquíades Andrés, la primera universidad fundada únicamente para aspirantes al sacerdocio. Y el fruto del esfuerzo pedagógico del maestro Ávila cuajó en lo que se ha llamado escuela sacerdotal avilista. Como señala el licenciado Muñoz, biógrafo del Santo Maestro, fue su intento, no sólo que se criasen hombre de letras, sino también de virtud; pues las Escuelas [la universidad] eran sólo para formar eclesiásticos, curas de almas y clérigos ejemplares.
Dado que la Universidad de Baeza fue la gran obra educativa del Maestro Ávila, se ha solicitado, y ha sido concedido por la Santa Sede, un Año Jubilar Avilista, que tendrá como núcleo fundamental la espiritualidad sacerdotal del presbítero secular, haciendo converger el magisterio de San Juan de Ávila y las orientaciones de la exhortación apostólica Pastores dabo vobis y la reciente Ratio Fundamentalis Institutionis Sacerdotalis.
.: Lema
San Juan de Ávila, pregonero de la Gloria de Dios (cf. Epístola 4)
.: Ubicación y Templos jubilares
Ciudad de Baeza:
- S. I. Catedral de la Natividad de Nuestra Señora.
- Capilla de San Juan Evangelista de la antigua Universidad.
.: Duración
- Apertura el 10 de mayo de 2019.
- Clausura el
31 de mayo de 2020.
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